Orientación Vocacional
La
orientación vocacional se entiende como una necesidad esencialmente
humana, de contenido educativo, a través de la cual se decide un
proyecto de vida formativo o profesional, realizado por medio de una
secuencia de opciones o elecciones que se van planteando ante la
necesidad de interpretar las cuestiones fundamentales de la vida, y todo
ello enmarcado en los contextos familiar y ambiental.
Podemos
decir que la madurez vocacional es la capacidad de decidirse en lo que
concierne al rol que se desea tener en la sociedad a lo largo de la
vida, a través de una determinada profesión incluyendo actitudes hacia
la toma de decisiones, comprensión de la demanda laboral, actividades de
planificación y desarrollo de capacidades vocacionales, además de la
propia elección vocacional. Está muy estrechamente vinculada al
desarrollo personal.
Para lograr un mayor grado de eficacia en la orientación vocacional, el alumno o alumna debe ser el protagonista de los procesos y deberá implicarse de forma activa
en sus aprendizajes llegando a establecer el mayor número posible de
dinámicas de autoorientación, a través de las mediaciones pertinentes
(tutor, orientador, profesorado, familia…), con el fin de desarrollar
una labor preventiva que permita anticipar las consecuencias de las
elecciones.
En el desarrollo vocacional se integran: intereses, capacidades y valores.
Proponemos un modelo triangular de orientación de estudios basado en el equilibrio que debe darse entre los intereses y valores, las aptitudes y el rendimiento escolar,
dependiendo de dicho equilibrio el acierto en las elecciones. A mayor
consonancia entre estas variables, mayor probabilidad de éxito
académico. Una variable más, influirá sobre las otras: el contexto, pues éste condiciona los intereses y organiza los estímulos que inciden sobre las aptitudes y el rendimiento.
Intereses: Conjunto de metas deseadas por el individuo en
los distintos ámbitos de su desarrollo : personal, académico,
vocacional, profesional,…. El interés va a suponer inclinación hacia el
desarrollo de determinadas tareas o actividades que se orientarán a su
consecución. Para conocer-medir los intereses se utilizan diversos
cuestionarios. Generalmente, los intereses varían a lo largo de la vida y
hay edades, como la adolescencia, en las que son más inestables.
Aptitudes:
Las aptitudes hacen referencia a la capacidad de un sujeto para
desarrollar determinadas conductas. Se diferencian dos tipos de
aptitudes: psicológicas como la inteligencia general y los factores que
la integran; y las pragmáticas que se refieren a las capacidades
(habilidades) que se dan para realizar con eficacia estudios o
profesiones (verbal, numérica, mecánica, física, musical…)
Rendimiento: Esfuerzo puesto para la realización de las tareas académicas y los resultados obtenidos (calificaciones)
La educación vocacional supone, en definitiva, el
conocimiento de sí mismo, de las ofertas educativas y los itinerarios
académicos, del mundo del trabajo y la integración de todas estas
informaciones. Lo que permitirá al propio alumno tomar las decisiones más adecuadas.
Para
colaborar en ese proceso, y siempre complementariamente a la labor
mediadora de tutores, orientador y profesores en el centro, te
facilitamos algunos recursos en la Web.
Conocimiento personal:
Conocimiento opciones académicas:
